Por: Pini Raffaele
Uno intuye, lee, olfatea. Uno conoce, recuerda, ha vivido… uno conoce al enemigo. Pero, para qué negarlo? Uno duda.
De pronto sucede algo que a uno le confirma su intuición.
Entonces uno se esperanza, recupera fe de la buena, de la que no está fundada en un dogma sino en una historia. Reconoce los rostros, las consignas, las canciones.
Están los que dicen Pueblo y los que dicen Gente. Ni hablar de los que dicen Vecinos.
Y, de pronto, eso que llamamos y nos llaman Pueblo aparecen de a uno, de a mil, de a cien mil, de a millones.
Y mayo se disfraza de octubre.
Ya no mete las patas en la fuente, pone la cara frente a las cámaras – icono absoluto de la existencia moderna.
Se aguanta bajo la lluvia, esquiva los paños bermellones de los enclaves coloniales… intuye que el sol del veinticinco viene asomando.
De fiesta pero calladitos, total, no hace falta. Los gordos toman nota y callan, pero de otra manera.
Febo asoma y Lujanea catedrales.
Cuando uno ve eso; cuando uno siente eso…
Uno se relaja.
Por Pini Raffaele
Lindop!
ResponderEliminarAle Lopez
Les gustó a: Silvina MAzzarella, Sonia García, Viviana Garay, María Inés Ferrero, Edu Zabalegui,Mirta Gotig, Elvira Romera.
ResponderEliminar(Publicado en Facebook de Sol Guerrero)